El ponerse a jugar a ir disfrazándose es una clase de juego de gran importancia que cada niño precisa de ir experimentando, puesto que ellos incluso lo buscan de manera natural.
Lo que ocurre es que los niños van a crecer y van desarrollándose mediante los juegos de disfraces. Todo lo que crean, inventan o reciclan es de gran ayuda de cara a poder reforzar aquellos escenarios de tal forma que los rituales cuentan con efectos positivos de lo más interesantes en su propio desarrollo. Vamos allá con los beneficios:
Fomento de la imaginación
Los niños cuentan con una imaginación importante, donde ellos no van a estar limitados sobre lo que conocen del mundo, puesto que su mente puede terminar yendo a cualquier lugar sin fronteras, tabúes, etc. Todo ello les permite hacer una serie de conexiones que pueden parecer impensables para los adultos.
Cuando los niños están jugando a estar disfrazándose, lo que sucede es que como dicen desde lacasadelosdisfraces.es, terminan por arraigar sus historias de imaginación como si fuera algo real por un corto periodo de tiempo, lo que hace que puedan explorar situaciones con mayor profundidad. Y cuando utilizan disfraces originales mucho mejor, porque los asocian a lo que ellos quieren, a su creatividad, y no a un estereotipo concreto que ya viene dado por el contexto que le rodea.
Cuando un niño se pone un casco de bombero, lo que ocurre es que también pasa a poner en práctica y a experimentar lo que es ayudar a la gente, al servicio de la comunidad y a la valentía.
Los juegos se disfracen ayudan al niño a que se explore a él mismo
Cuando se hace pasar por otras personas, como nos dicen los profesionales de la casas de los disfraces, lo que ocurre es que los niños experimentan ideas nuevas y comportamientos. Ellos van a poder decidir lo que les gusta más y lo que no, pudiendo explorar los elementos de una situación nueva, identificando aquello que les gusta lo que no.
Respecto a esto, es fundamental dejar claro que los niños deben elegir lo que desean ser. Con el disfraz el niño lo que hace es ir experimentando una serie de sensaciones o de vivencias que realmente son únicas.
Aparecen una serie de sentimientos que no se esperan y que se desconocen. Algo que es importante es que el niño va a asumir protagonismo y hace que sea más sencillo para él ir tomando una serie de iniciativas.
El disfraz es un buen artilugio para el fomento de la comunicación y para expresar de manera libre las ideas que se tengan. Hablamos de los juegos, puesto que cuando se disfraza el niño puede acabar tomando una serie de decisiones de importancia sobre el comportamiento o el rol que debe tener, lo que va a ser de gran ayuda para poder conociéndose a él mismo progresivamente.
Los juegos de disfraces fortalecen las relaciones
Cuando se juega con los disfraces estamos ante una importante lección de empatía, donde se debe vivir la vida de otra persona, un niño tiene que ponerse en los zapatos de la misma.
Todo ello termina por fortalecer una habilidad mucho más amplia, que al final es la capacidad para entender los sentimientos que tienen otras personas.
Por todo ello, los juegos de disfraces van a ayudar al niño para que aprenda a tratar y trabajar con las personas en la escuela primeramente y luego en sus puestos de trabajo luego.
Como va a sentir cosas nuevas y que son insospechadas, va a descubrir una serie de valorar que van a terminar por entrar en la interacción con las otras personas, participen o no de forma directa en el mismo juego. Hablamos del amor, la amistad, el juego, la valentía, el poder de mando, etc.
Jugar a disfrazarse es de gran ayuda de cara a que se establezca una identificación de género
Aunque no existen reglas en concreto parala identidad de género, muchas de las personas están divididas en una serie de categorías. Según los niños van jugando con disfraces van experimentando con varias identidades en materia de género y con los comportamientos de los personajes.
Habitualmente, los niños se ven con gran atracción hacia los papeles en los que son héroes, militares, constructores o padres. En el caso de las niñas sienten atracción por el papel de madre, maestra artista o bailarina.
El que se salga de estos parámetros no es algo malo, pero sí que permite que se puedan ver las tendencias y los intereses de los niños. Esto es algo habitual, puesto que los niños experimentan con varios roles de género según aprenden sobre ellos mismos. Esperamos que os haya sido de gran utilidad.